La contaminación generada por internet viene dada por el despilfarramiento de electricidad causada por la gran mayoría de centros de datos, donde se almacena toda la información de dicha red mundial.
Para que tengamos cualquier tipo de página web, blogs o redes sociales como Facebook o Twitter son necesarios centros de datos donde se almacene toda la información de sus usuarios, ya sea texto, foto, música o vídeo. Lo mismo sucede con las tiendas online como iTunes o Amazon. Incluso webs videográficas como Youtube necesitan un soporte físico donde mantener toda la información accesible y preparada para los clics de los internautas. Millares de discos duros enlazados en servidores digitales encendidos las 24 horas del día, los 365 días del año. Para tanta actividad mecánica se necesita una refrigeración industrial para enfriar las enormes salas donde están los servidores.
Según estudios se ha descubierto que parte de dicho gasto eléctrico es innecesario, un despilfarro gratuito indiferente para dichas empresas, ya que sus beneficios son multimillonarios. Este abuso de consumo eléctrico genera más trabajo para las compañías eléctricas que se ven obligadas a contaminar más por ese motivo. Lo peor de estos datos es que los servidores útiles que se están utilizando actualmente sólo sumarían el 6% o el 12% de todos los que están activos, el resto de máquinas únicamente están encendidas a la espera de que en algún momento haya una subida del uso por sorpresa.
Algunos expertos dicen que el consumo eléctrico mundial de todos los centros de datos asciende a los 30.000 millones de vatios. Para que nos hagamos una idea aproximada de lo que significa esta cifra, hablaríamos de una producción similar a 30 centrales nucleares. Algo insostenible en lo que algunas empresas punteras están trabajando, como es el caso de Google o Facebook, quienes están diseñando sus propios sistemas de servidores y refrigeración de los mismos de una forma más eficiente.
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