SANTO DOMINGO,R.D.- En el país existen múltiples generadores
privados, dentro de los cuales se destacan dos empresas, que se
diferencian de las demás por ser generadores/distribuidores aislados,
con desempeños como suplidores confiables que les ha merecido el
reconocimiento de sus usuarios, aunque con algún cuestionamiento en
cuanto a los precios que venden la energía.
Estas empresas son las que operan en el norte de la provincia de Samaná y en la región de Bávaro.
Ambas empresas gozan de solvencia financiera y técnica, y haciendo aparte sus costos, contrato de concesión u otras condiciones, son eficientes servidoras del fluido eléctrico.
Si contrastamos sus tarifas con las que ejecutan las distribuidoras públicas, Edeste, Edesur y Edenorte, encontramos un abismo extraordinario, cuya falta de simplificación explicaría en parte el porqué de algunos de los graves problemas del sector eléctrico, amén del diferencial en precio, que es superior al de la energía pública
Para solo citar un ejemplo, cuando se intenta descifrar el esquema tarifario de Edesur, encontramos que en el cuadro referente a las mismas en su página web existen tres tipos de tarifas: 1,2 y 3; y cada cual a su vez se descompone en un sinfín de sub tarifas, en adición a la denominada tarifa por peaje.
Tal fragmentación enmaraña el cálculo del precio real y dificulta la toma de decisiones racionales.
La complejidad atenta contra las posibilidades de determinación por parte del usuario y permite “esconder” demasiados elementos vitales para la real comprensión de si el precio, o la tarifa, es parte del hoyo negro eléctrico o no.
Es por ello que dentro del conjunto de decisiones y acciones envueltas en un Pacto Eléctrico, se hace necesario imitar el ejemplo de los “generadores/distribuidores aislados” en cuanto a la sencillez y trasparencia de las tarifas que pagamos los usuarios.
Escrito por: Frederich E. Berges.
http://www.eldia.com.do/columnas/2013/3/11/109146/Tarifas-electricas-publica-y-privada
Estas empresas son las que operan en el norte de la provincia de Samaná y en la región de Bávaro.
Ambas empresas gozan de solvencia financiera y técnica, y haciendo aparte sus costos, contrato de concesión u otras condiciones, son eficientes servidoras del fluido eléctrico.
Si contrastamos sus tarifas con las que ejecutan las distribuidoras públicas, Edeste, Edesur y Edenorte, encontramos un abismo extraordinario, cuya falta de simplificación explicaría en parte el porqué de algunos de los graves problemas del sector eléctrico, amén del diferencial en precio, que es superior al de la energía pública
Para solo citar un ejemplo, cuando se intenta descifrar el esquema tarifario de Edesur, encontramos que en el cuadro referente a las mismas en su página web existen tres tipos de tarifas: 1,2 y 3; y cada cual a su vez se descompone en un sinfín de sub tarifas, en adición a la denominada tarifa por peaje.
Tal fragmentación enmaraña el cálculo del precio real y dificulta la toma de decisiones racionales.
La complejidad atenta contra las posibilidades de determinación por parte del usuario y permite “esconder” demasiados elementos vitales para la real comprensión de si el precio, o la tarifa, es parte del hoyo negro eléctrico o no.
Es por ello que dentro del conjunto de decisiones y acciones envueltas en un Pacto Eléctrico, se hace necesario imitar el ejemplo de los “generadores/distribuidores aislados” en cuanto a la sencillez y trasparencia de las tarifas que pagamos los usuarios.
Escrito por: Frederich E. Berges.
http://www.eldia.com.do/columnas/2013/3/11/109146/Tarifas-electricas-publica-y-privada
No hay comentarios:
Publicar un comentario