sábado, 9 de agosto de 2014

La distribución de Energía Eléctrica y su situación hasta el 2013

A pesar del progreso logrado en niveles de cobertura, la distribución de electricidad ha sufrido un enorme rezago en su recuperación financiera. El débil desempeño en su operación, con 
pérdidas eléctricas promedio del orden del 33% al cierre de 2013, sumado al impacto de los precios del petróleo sobre sus compras de energía, bajo un esquema de tarifas que no permite traspasar automáticamente las variaciones de los costos a los usuarios finales, han llevado a las EDEs a una situación financiera insostenible. 
Solo en el año 2013, el Gobierno de la República Dominicana (GRD) realizó transferencias corrientes al sector eléctrico del orden de los US$830 millones, alrededor del 1,4% del Producto Interno Bruto (PIB). 
 Las pérdidas totales de energía del 33,1%, registradas por las EDEs en 2013, equivalen a 3.956 GWh, un valor 2,4% menor al de 2012. Se pueden comprobar los porcentajes de pérdidas para cada una de las EDEs en los dos últimos años. 
Entre las razones del elevado nivel de pérdidas están: la vulnerabilidad de un alto porcentaje de los circuitos de la red de distribución, dada la falta de rehabilitación de la misma y la falta de equipos de medida y de otros materiales necesarios para normalizar los suministros. En un sistema de distribución con un potencial estimado de cerca de 2,5 millones de usuarios, se facturaban 1.894.010 a finales de 2013, aunque de manera deficiente. Los clientes en conexión directa (sin medidor) llegan a alrededor de un millón, a los cuales se les factura un valor fijo mensual sin relación directa a su consumo real. De igual manera, el deterioro de 
las redes de distribución impide a las EDEs realizar el corte del servicio a los clientes que se resisten a pagar por el mismo, entre ellos alrededor de 600.000 usuarios irregulares sin contrato, 25% del total. 
A lo anterior, se suman las conexiones ilegales y el hurto realizado por algunos clientes con medidor, las anomalías técnicas a lo largo de extensos circuitos causando pérdidas técnicas, y la falta de herramientas sistematizadas de seguimiento que les permitan a las EDEs y a la CDEEE mantener bases de datos fiables y actualizados. 

Existe una reticencia al pago por el servicio eléctrico en gran parte de los usuarios. Al cierre de 2012 existían 421.264 clientes contratados que no realizaban pago alguno. Está situación es intensificada por la mala calidad y discontinuidad del servicio, dado que apenas a 903.811, el 48% de los clientes comercialmente activos en las bases de datos de las EDEs, se les brinda servicio 24 horas al día y que la disponibilidad promedio del servicio para 2013 fue de 
82,8%, sólo 1,4% mayor que en 2012. El Índice de Cobranza (IC) agregado para las EDEs en 2013 fue de 95,4%, 0,4% más que en 2012. Se muestra el IC para cada una de las EDEs para los dos últimos años, se observa que en 2013 el IC mejoró marginalmente en EdeNorte y EdeEste y se redujo en EdeSur. 

Al combinar los indicadores de pérdidas y de cobranza por medio del Índice de Recuperación de Efectivo (CRI, por sus siglas en inglés), los resultados de los dos últimos años, tanto totales como a nivel de empresas individuales, distan mucho de los índices de eficiencia (CRI ≥ 85%) que permitirían que las empresas de distribución perciban los ingresos suficientes para cumplir con los compromisos adquiridos con los generadores que les suministran la energía.


http://idbdocs.iadb.org/wsdocs/getdocument.aspx?docnum=38824551

1 comentario:

  1. Pérdidas de Energía = Energía Facturada (GWh) / Energía Comprada (GWh)
    IC = Energía Cobrada ($) /Energía Facturada ($)
    CRI = [Energía Facturada (GWh)/Energía Comprada (GWh)] x [Energía Cobrada ($) /Energía Facturada ($)]

    ResponderEliminar