Indicadores de desarrollo de RD

América Latina ha tenido largos períodos de inestabilidad política y de incertidumbre económica, que han jugado un papel crucial en su estado actual de desarrollo.
El colonialismo, los gobiernos dictatoriales, las intervenciones extranjeras - tanto militares como económicas- semi-democracias, los gobiernos corruptos y sistemas legales débiles, entre otros fenómenos sociales, han contribuido al lentísimo ritmo de construcción de una sociedad donde las violaciones a los derechos humanos no sean una preocupación importante. 
Sin embarg “Las condiciones cambiantes del panorama mundial a finales de los años ochenta establecen una nueva oportunidad para América Latina: la estabilidad social se logró gracias a la firma de los tratados entre el gobierno y la guerrilla, especialmente en América Central, la re-negociación de la deuda externa y el fin de las dictaduras que llevaron el inicio de los procesos democráticos” (Tames.: 2013, Pag. 2.).
La República Dominicana ha sido principalmente un exportador de azúcar, café y tabaco, pero en los últimos años el sector de servicios se ha convertido en el mayor empleador de la economía, debido al crecimiento en las telecomunicaciones, el turismo y las zonas francas. La economía es altamente dependiente de los EE.UU., el destino de más de la mitad de sus exportaciones. Las remesas desde EE.UU. y Europa constituye cerca de una décima parte del PIB, lo que equivale a casi la mitad de las exportaciones y las tres cuartas partes de los ingresos del turismo. (CIA: 2013).
El estudio Índice de Desarrollo Humano realizado por el PNUD reveló que: “Entre 1980 y el 2012, la esperanza de vida en la República Dominicana -al nacer- aumentó en 10.7 años, la media de años de escolaridad aumentó en 3.3 años y los años de escolaridad aumentaron en 2.8. El PIB per cápita de los dominicanos aumentó en un 133 por ciento entre 1980 y 2012.” (PNUD:. 2013, Pág. 2).
A fin de combatir la desigualdad y la elevada tasa de desempleo, el gobierno está destinando recursos a la financiación de  micros y mediana empresas, a los sectores informales, y para las empresas familiares. También está realizando una gran inyección de capital en la agricultura, y la construcción de viviendas de interés social. 
En cuanto al sector de la educación, el gobierno dedica -por primera vez- el 4% de su presupuesto a la educación conforme a lo establecido por la ley. Se está realizando una campaña educativa para erradicar el analfabetismo entre la población. Además, el gobierno está reestructurando el sistema escolar, con la creación del período escolar extendido (hasta 8 horas al día), el establecimiento de centros preescolares universales, el aumento de sueldos de los maestros, la construcción de veintiocho mil aulas nuevas y el acceso a los programas profesionales de posgrado y especialización para profesores, así como el incremento de becas para estudios técnicos y profesionales tanto a nivel local como en el exterior. 
Por otra parte, en el área de salud y servicios humanos, el gobierno está modernizando el sistema hospitalario actual y construyendo nuevas instalaciones. Por último, se está ampliando y mejorando el seguro universal de salud, sin costo alguno para la población en general y un sistema de ayuda directa a los más desposeídos. 
Desde mediados de 1990 el sistema democrático y el sistema judicial se han ido consolidando en la RD, con un sistema múltiple de partidos políticos, la reestructuración del poder judicial y la adhesión a los tratados internacionales para la protección de los derechos humanos y el medio ambiente. Sin embargo, “la transparencia de la actividad gubernamental y la rendición de cuentas siguen siendo bajos ... [Y] la imparcialidad y la competencia [de los actores del sistema judicial] deben seguir fortaleciéndose” (Dominican Republic-European Union:. 2008, Pág. 4).
Además de la centralización de la autoridad, confiriendo poderes para el presidente y su oficina con controles muy limitados “check and balance”, falta de implementación del servicio de carrera administrativa, y la ausencia de un sistema de contratación moderna”, todo esto produce una percepción de la sociedad civil de que el papel del gobierno es proveer favor o premiar en lugar de llevar a cabo los servicios públicos de acuerdo con reglas objetivas y estándares” (Dominican Republic-European Union:. 2008, Pág. 7). 
Actualmente el gobierno está creando instrumentos legales y administrativos para mejorar la rendición de cuentas y la transparencia de los funcionarios públicos, ha sometido al congreso la creación y/o el cambio de la ley para combatir la delincuencia y reducir la brutalidad policial, así como la actualización de la legislación penal. 
La República Dominicana se encuentra en una región vulnerable, afectada cada año con un número de tormentas tropicales y huracanes, lo que aumenta la pobreza y la desigualdad. Además, también se ha enfrentado en el pasado reciente con una deforestación galopante. La cual se está enfrentado con un nuevo sistema jurídico para la protección del medio ambiente y la responsabilidad, así como proyectos específicos del gobierno. 
La sociedad civil ha jugado un papel importante en la defensa del medio ambiente, ejerciendo presión sobre los funcionarios del gobierno a tomar medidas sobre ciertos recursos naturales que se encuentran en riesgo de ser arrasados o contaminados. Por ejemplo, recientemente el gobierno accedió a rechazar un contrato con una empresa extranjera para explotar una mina en una zona conocida como Loma Miranda.
Según el PNUD, estudios independientes y académicos, si este proyecto se hubiese ejecutado habría habido una degradación irrecuperable de los ríos y bosques de la región y, en consecuencia, un impacto negativo en las vidas de las personas en las comunidades circundantes. 
A pesar de la reciente historia de dictadura y caudillismo en la República Dominicana, estudios de organizaciones internacionales e indicadores estándares muestran que este país está tomando medidas para asegurar un desarrollo sostenible en el futuro. La cooperación internacional con organizaciones como la Unión Europea, el Banco Interamericano de Desarrollo, las Naciones Unidas y el Banco Mundial, entre otros, asegura la continuidad de las tendencias para el desarrollo sostenible de la República Dominicana. 
Por otra parte, los “Objetivos de Desarrollo del Milenio y el Desarrollo Sostenible”, proyecto hecho en cooperación con las Naciones Unidas que describe las intervenciones que se realizaran en: Lucha contra el Hambre y la Desnutrición, Educación, Igualdad de Género y Empoderamiento de la Mujer, la Salud y el VIH-SIDA, Medio Ambiente e Infraestructura”, es un instrumento para la continuación de los trabajos para la sostenibilidad. Además, el actual gobierno está fortaleciendo y acelerando las inversiones en sectores que reduzcan la desigualdad y la pobreza y, en consecuencia, la creación de un clima de confianza en la población dominicana. Esto reducirá la posibilidad de revueltas sociales y huelgas que daría lugar a la inestabilidad social. 

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