SANTO DOMINGO,R.D.- Son tres pensionados entre 65 y 68 años de edad. Trabajaron por décadas. Una en mercadeo y ventas, otra como maestra y el tercero como odontólogo. Hoy sus pensiones van desde los RD$5,100 hasta los RD$22 mil.
A pesar de estar retirados, las pensiones les impiden hacerlo del todo. Si no fuera por la ayuda de familiares, y porque dos de ellos siguen trabajando de forma independiente, no podrían sustentar sus gastos con la compensación que queda de sus formales años productivos, en un tiempo en que la canasta básica promedio supera los RD$27 mil.
Una hija del odontólogo dice que su padre, de 65 años, sufre episodios de depresión cuando recuerda que ganaba más de RD$45 mil mensuales por sus servicios para el Ministerio de Salud Pública, cuya plaza laboral la obtuvo por concurso. Aunque su pensión se había acordado en RD$23 mil, ahora que está completado su expediente en el Ministerio de Hacienda, le informan que será de RD$16 mil.
A consecuencia de sus quebrantos de salud, su padre no puede seguir trabajando, y vive de los ahorros. A diferencia de antes, ella y otra hermana han tenido que cargar con el pago de los servicios de la casa, de salud y los alimentos. “Él se deprimió mucho cuando salió lo de la pensión porque lo que menos quieren los padres a cierta edad es terminar dependiendo de los hijos, y más cuando no estamos hablando de alguien de ochenta años”, dice la joven.
En el caso de la señora que se dedicaba al mercadeo y ventas, sus hijas también deben ayudarla económicamente. Pensionada por el Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), recibe poco más de RD$5,100 mensuales. A pesar de no tener una salud óptima, a sus 68 años trata de conseguir algún ingreso con la venta de ropa interior y productos de uso personal, y espera con celo un reducido alquiler que recibe de una propiedad.
La economía de muchos adultos mayores pensionados en el país está llena de necesidades. Y la situación no vislumbra una mejoría sustancial. El informe “Panorama de las Pensiones: América Latina y el Caribe”, de la OCDE, el Banco Mundial y el BID, indica que República Dominicana, junto con Haití, México y Surinam, ofrece tasas de reemplazo futuras de menos del 30% para personas que empezaron a trabajar hoy con ingresos promedio a lo largo de sus carreras.
En la edición del pasado martes, DL publicó un editorial criticando la situación de las pensiones que reciben las personas de la tercera edad. “De nada sirven los años de servicio a la empresa o al gobierno, ni las cotizaciones que hicieran a los diferentes planes de pensiones que hemos tenido, si al final de la vida productiva lo que les entreguen no alcance ni para comprar la comida de un mes, para no hablar de los demás gastos de una vida decente”, decía uno de sus párrafos.
De los tres pensionados, la maestra tiene 67 años y recibe poco más de RD$22 mil por pensión. Corresponde al 85% de su salario en un colegio privado, pues tuvo que retirarse antes de tiempo por razones de salud.
“Tengo aquí (en la casa) un cuido de niños”, dice la señora. “Tan pronto me jubilé, decidí trabajar en la casa con los niños más pequeños, porque son más domables. Tengo la ayuda de mis hijos, ellos me ayudan con el pago de la casa que son RD$16,500, y en la comida y medicamentos se me va mucho dinero. Una hermana me manda dinero de Estados Unidos y una caja con comida”.
http://www.diariolibre.com/noticias/2015/06/25/i1210781_cuando-pensionarse-una-carga-familiar.html
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