| PRESAS | NIVEL DE OPERACIÓN MÁX. | NIVEL DE OPERACIÓN MÍN. | NIVEL AL 5/10/2016 |
|---|---|---|---|
| Tavera | 327.50 | 300.00 | 315.74 |
| López-Angostura | 225.00 | 217.50 | 221.25 |
| Bao | 327.50 | 311.00 | 315.74 |
| Rincón | 122.00 | 108.50 | 119.78 |
| Hatillo | 86.50 | 70.00 | 86.52 |
| Río Blanco | 624.00 | 612.00 | 624.92 |
| Valdesia | 150.00 | 130.75 | 145.34 |
| Jigüey | 541.50 | 500.00 | 538.82 |
| Aguacate | 329.00 | 324.00 | 320.99 |
| Sabana Yegua | 396.40 | 358.00 | 381.56 |
| Sabaneta | 644.00 | 612.00 | 635.61 |
| Presa de Monción | 280.00 | 223.00 | 266.65 |
| Contra embalse de Monción | 124.00 | 122.00 | 123.28 |
| Maguaca | 57.00 | 46.70 | 56.35 |
| Chacuey | 54.63 | 47.00 | 47.49 |
SANTO DOMINGO. Las copiosas precipitaciones generadas por el huracán Matthew han favorecido el nivel de las presas del país, sin embargo, las autoridades vigilan las de Hatillo y Rincón, ya que la primera alcanzó su capacidad máxima y la segunda está próximo a hacerlo.
“La cuenca del Bajo Yuna debe estar bajo vigilancia”, advirtió a Diario Libre Luis Cuevas, del Comité de Presas, al término de una rueda de prensa en el Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Indicó que Hatillo, localizada en Cotuí, tiene un nivel de 86.52 metros sobre el nivel del mar (MSNM), significando que está ligeramente sobre su nivel máximo, que es de 86.50 MSNM, y está a punto de verter. Rincón, ubicada en La Vega, se encuentra a 119.78 MSNM, cuando su capacidad máxima es 122 MSNM, y para este fin de semana empezaría a verter.
Cuevas garantizó que el COE tiene en su carpeta de vigilancia las zonas aguas abajo de estas presas para tomar las medidas necesarias.
Otras infraestructuras de este tipo que están llegando o ya alcanzaron su nivel máximo de operación son López-Angostura, Río Blanco, Valdesia, Jigüey, Sabana Yegua y Maguaca, y el contra embalse de Monción.
En el complejo Jigüey-Valdesia, que beneficia al servicio de agua potable del Gran Santo Domingo, Baní y San Cristóbal, se decidió recuperar los niveles de las presas cerrando la de Valdesia. En ese sentido, Cuevas informó que está garantizado el abastecimiento de agua para inicios de 2017 en estos territorios.
A pesar de que el huracán Matthew está hoy más alejado de la República Dominicana y se descontinuó el aviso de alerta por vientos de tormenta tropical, su campo nuboso incide en el territorio. El COE mantiene el nivel de alerta roja para 20 provincias y 11 en amarilla por posibles inundaciones repentinas urbanas, crecidas de ríos, arroyos y cañadas, y deslizamientos de tierra.
En las últimas 24 horas 3,174 viviendas resultaron afectadas, 16 con daños parciales y 25 destruidas. Además, 35,019 personas se desplazaron a casas de familiares, 1,522 se movieron a albergues oficiales, 46 comunidades quedaron incomunicadas y tres puentes afectados.
http://www.diariolibre.com/medioambiente/presa-de-hatillo-alcanzo-su-nivel-maximo-rincon-esta-a-punto-YD5115320
Hay una potencia instalada de 469 MW en 33 plantas hidroeléctricas que son propiedad del estado y se encuentran distribuidas en 22 centrales hidroeléctricas en los sitios donde hay rios con mayor caudal, en el norte y el sur del país. La potencia máxima instalada es de 49 MW en Jigüey y un promedio de sólo 14,2 MW en total. Las más importantes son Jigüey I, Jigüey II (49MW Cada una), Tavera I-II (con 48 MW cada una), Valdesia I-II (con 28 MW cada una), Aguacate I-II ,Monción I-II (26MW Cada una).
ResponderEliminarEstas plantas producen a un costo mínimo porque no usan combustible como manantial de energía para producir electricidad. Económicamente son las más eficientes y convenientes para el país.
Y tenía razón el poeta cuando decía que en este fluvial país, con su asombro de rios verticales, hacen falta hombres que descifren los dioses de los ríos y los suban temblando a los embalses. Esos dioses no son los peces, sino los KWh que se pueden producir a mínimo costo.
Negativa resulta la sedimentación causada por erosión y otros eventos naturales imprevisibles, como lo son los Huracanes, que disminuye la capacidad de almacenamiento de las presas, por lo que deben realizarse batimetrías periódicas para determinar los niveles de sedimento en los embalses y tomar las medidas necesarias de drenaje.
El tiempo de construcción y comienzo de operación de una planta hidroeléctrica es relativamente largo, de 2 a 4 años. Además la capacidad de las plantas es baja y el sistema sólo puede usarse para suplementar la producción.
Todo dicho, si se aumenta la capacidad de producción del actual 15 % del total nacional a 30 %, o sea produciendo unos 2000 GWh adicionales con la ayuda de hidroeléctricas, el país ahorraría unos 220 millones de U$Dólares anuales. El país cuenta con los recursos fluviales para llegar a esta meta.