domingo, 5 de junio de 2016

Academia de Ciencias con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente

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SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El 5 de junio de cada año se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, en ese sentido, la la Academia de Ciencias emitió una declaración en la que, entre otros puntos, llama a encarar la sostenibilidad con un nuevo paradigma, fundamentado en dar centralidad a la vida y entender que todos los seres, incluso los humanos, como interdependientes y por eso solidarios en el mismo destino.
Declaración de la Academia de Ciencias con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente. Este año con el lema: siete mil millones de sueños; un solo planeta:
Hace 44 años, la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el 5 de junio para conmemorar el Día Mundial del Medio Ambiente, con el objetivo principal de sensibilizar a la opinión pública respeto a la necesidad de su preservación y mejora. Ese hito es ampliamente reconocido como el comienzo de la toma de conciencia de la comunidad mundial acerca de los problemas ambientales globales.
Posteriormente al 1992, otro importante encuentro celebrado en Río de Janeiro retoma como tema central y primordial para el desarrollo del planeta la problemática ambiental mundial, adoptándose un ambicioso programa de acción para el desarrollo sostenible global, cuyas grandes áreas de actuación fueron: la lucha contra el cambio climático, la protección de la biodiversidad y la eliminación en la emisión de sustancia tóxicas.
Esta reunión será recordada como la cumbre internacional de carácter ambiental más importante que se haya celebrado jamás, ya que por vez primera la concertación y la cooperación prevalecieron sobre el conflicto; además, porque en ella se adoptó el concepto del Desarrollo Sostenible para poder aspirar a un futuro posible.
Veinte años después, nuevamente en Río de Janeiro, se realiza un nuevo encuentro con el objetivo de asumir un compromiso político renovado en favor del desarrollo sostenible, evaluar los avances logrados hasta el momento y las lagunas que aún persisten en la aplicación de los resultados de las principales cumbres en materia de desarrollo sostenible; y además, hacer frente a los nuevos retos que en esta materia están surgiendo. Los grandes temas de la Cumbre Río +20 fueron la economía verde en el contexto de la sustentabilidad, la erradicación de la pobreza y el marco institucional del desarrollo sustentable.
No obstante, a pesar de las decenas de acuerdos suscritos, la multiplicidad de convenciones realizadas, los miles de páginas escritas y la variedad de compromisos asumidos, con pesar hoy vemos, que los problemas ambientales no han sido resueltos y que las razones y acciones fundamentales que los generan se mantienen en un acelerado y constante crecimiento que parece no tener fin.
En atención a esa dura y cruel realidad que afecta a todas las formas de vida del planeta, la Academia de Ciencias entiende que es el momento de hacer un alto en el camino y llama a la sociedad a reflexionar sobre esta situación, con motivo de la celebración el Día Mundial del Medio Ambiente, este 5 de junio.
El tema del Día Mundial del Medio Ambiente para este año es “Siete mil millones de sueños. Un solo planeta. Consume con moderación”.
Once palabras, comunes, sencillas, pero que ponen de manifiesto una gran verdad, y es que la vida de los seres humanos depende del medio natural que le rodea, de la biodiversidad y de los elementos físicos y bilógicos que le dan sustento, todos contenidos en un único planeta en donde se hace posible la vida como la conocemos.
Sin embargo, vivimos de espalda a esa realidad, cuando de forma sistemática, llevamos a cabo acciones que deterioran, destruyen y afectan aceleradamente los limitados recursos naturales.
Jamás debemos olvidar que el medio ambiente acoge el conjunto de elementos naturales que hacen posible el desenvolvimiento humano, proveyendo oportunidades para la obtención de agua, salud, alimentación, paisaje y belleza escénica, energía eléctrica, aire puro, generación de empleos, calidad de vida, regulación de temperatura, procesos ecológicos que brindan servicios de diversos tipos, fármacos y otros bienes que hacen posible la vida.
Tristemente, este día encuentra a nuestro país y al mundo en una situación crítica y de serias amenazas para el medio natural y sus componentes, que muestra un presente y presagia un futuro preocupante para la integridad de la humanidad.
La reducción continua y sistemática de los bosques, la disminución de los caudales acuíferos, la destrucción de ecosistemas críticos, la desaparición de especies de flora y fauna, el crecimiento de la contaminación a todos los niveles y los grandes cambios en los patrones climáticos. Así como la erosión de los suelos de vocación agrícola, la contaminación y erosión de las costas, la minería irracional desarrollada en ecosistemas frágiles, la extracción indiscriminada de arena y grava de los ríos; así mismo, la práctica del conuquismo, la cacería, el desarrollo de proyectos de infraestructura en las áreas protegidas, son acciones que han diezmando la capacidad de resiliencia del planeta.
Todos estos elementos forman parte de la realidad nacional y mundial, palpable y tangible, pero aun así seguimos como si dispusiéramos de un planeta con recursos ilimitados, sin tomar en cuenta que el afán de inversión y la generación de empleos a cualquier precio, nos conduce a un gran abismo que limita las posibilidades de la vida en la tierra.
En esta ocasión, de manera especial, la ACRD quiere llamar la atención sobre el notable y acelerado cambio de uso en los suelos agrícolas, la severa degradación del recurso agua en cuanto a su calidad y disponibilidad, hecho que se agrava significativamente por los impactos que se derivan de los cambios globales del clima, por la condición de pequeño Estado insular que somos y nuestra posición en una de la rutas ciclónicas más activas del planeta, las amenazas son más extremas.
Esta institución describe con tal crudeza la situación ambiental, con el único y noble propósito, de que nuestra sociedad cambie su actitud de uso irracional del medio natural, respetando las leyes ambientales de la nación, aplicando y siguiendo rigurosamente los procedimientos de gestión ambiental, ajena a cualquier tipo de influencia económica o política, para que se pueda asegurar la integridad de nuestros recursos naturales.
La Academia de Ciencias de la República Dominicana hace voto para que ahora que tendremos autoridades nuevas y otras que seguirán al frente de los estamentos públicos, su Norte sea el que se cumpla la Constitución de la República, las leyes y normas ambientales del país, para asegurar la sostenibilidad de la nación, ya que, tal como expresa la introducción de la Carta de la Tierra, estamos delante de un momento crítico en la historia planetaria, en una época en que la humanidad tiene que elegir su futuro, la elección de fondo deberá ser, promover una alianza global para cuidar la Tierra y para cuidarnos los seres humanos los unos a los otros o bien corremos el riesgo de una doble destrucción. La nuestra y la de la diversidad de la vida.
Esta vez no habrá un Arca de Noé. O nos salvamos todos o todos correremos el mismo y trágico destino.
Debemos encarar la sostenibilidad con un nuevo paradigma, fundamentado en dar centralidad a la vida y entender que todos los seres, incluso los humanos, como interdependientes y por eso solidarios en el mismo destino.

http://acento.com.do/2016/ecologia/8354492-declaracion-la-academia-ciencias-motivo-del-dia-mundial-del-medio-ambiente/

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